Repollo rehogado




Este repollo vale como primer plato o como guarnición. Se cuece en su propio jugo y queda muy rico.

  • Aceite
  • 1 ajo
  • Taquitos de jamón serrano (puede ser bacon)
  • 1/2 repollo

En una cacerola calentar un poco de aceite (2 cucharadas +/-).

Dorar el ajo en láminas y sin que se queme añadir los taquitos de jamón, dorarlos un poco.

Luego poner el repollo cortado en juliana, remover, bajar el fuego y tapar. Hay que hacerlo con el fuego bajito para que no se queme.

De vez en cuando se le da una vuelta y se va viendo la consistencia.

Se puede dejar al dente o más hecho, al gusto de cada uno.

De esta forma también se pueden hacer las espinacas, una vez hechas  (sin jamón), se les añade queso feta desmenuzado, y tenemos un  relleno para  empanadillas.